La joven banda de Barcelona se metió al público en el bolsillo a base de pocas palabras y cañonazos en forma de canciones.
Un conocido y mitiquísimo grupo de rap dijo una vez “don’t believe the hype”. Sin embargo, las ganas de ver en directo a un grupo por primera vez, junto con la curiosidad que suscitan los buenos comentarios de la gente y de los medios y la calidad de lo que se ha escuchado previamente en casa, hacen que inevitablemente nos pongamos ciertas expectativas sobre el directo del grupo en cuestión. En el caso de Mourn, el hype es real. MUY real.
Tras sorprender con su primer disco a público y crítica nacional e internacional en 2014, conseguir distribuirlo en Estados Unidos con el sello Captured Tracks (DIIV, Mac Demarco…) y dar conciertos al otro lado del charco, la banda de Cabrils (Barcelona) vuelve a la carga con su segundo LP, Ha Ha He (2016), publicado el pasado mes de junio. Este nuevo trabajo sigue en la misma línea que el anterior: temas llenos de nostalgia y rabia acuchillante, notándose la mejora en calidad de sonido y la preocupación por los detalles. Sin embargo, es en directo donde realmente se aprecia la potencia de la banda, y su paso por la Wah Wah de Valencia el pasado viernes 24 de febrero era la oportunidad perfecta para confirmarlo. Sin embargo, Mourn no era el único factor que despertó la curiosidad de los asistentes, y es que el grupo contaba con unos anfitriones locales que bien merecen una mención.
Tercer Sol abríó la noche impregnando la sala desde la primera nota con la densidad sonora que define al conjunto. Bajos constantes, baterías tribales y contundentes, dementes capas y saturaciones de guitarra, sinuosas melodías de teclado… Todos estos elementos conformaron la órbita sobre la que los presentes giraban, en torno al misterioso y oscuro astro musical que se erige con su música. A través de temas ya grabados y publicados como ‘Nuevo Amanecer’ o ‘Melange’ y otros temas inéditos, dejaron claras sus referencias más ruidosas y clásicas. Y es que uno no puede evitar acordarse de Thw Velvet Underground al escuchar esas atmósferas que se extienden hasta el infinito y que envuelven al público en el bucle perfecto.
Es realmente una buena noticia que, tras un parón indefinido, el grupo haya vuelto a subirse a los escenarios, anticipando la salida de un segundo disco que esperamos que llegue pronto, para seguir seguir el torrente de una de las bandas que más ha dado que hablar en Valencia estos últimos años.
Una vez caldeado el ambiente, y con un público expectante, Mourn se subieron a la tarima para comenzar con la caña desde la primera canción, una intro en la que Antonio, el batería, ya dejó ver los poderosos breaks que se gasta y que fue sacando a lo largo del concierto, dejando claro dónde recae buena parte de la contundencia del grupo.
Llamó la atención la timidez con la que se dirigieron hacia el público durante el bolo, reservándose las sensaciones y el desparpajo entre miradas y sonrisas de complicidad entre ellas. Sin embargo, esta timidez tenía su contraste a la hora de ejecutar los temas, siempre impregnados de guitarras afiladas, riffs alocados y voces agudas y desgarradoras de Jazz y Carla que destacan por un sentimiento que acompaña la lógica de las letras del grupo: un lamento enrabietado, que surge de las experiencias personales de los integrantes.
En cuanto a canciones, el concierto fue un intenso repaso tanto a canciones de su primer trabajo como ‘Otitis’, ‘Marshall’ y ‘Silver Gold’, como de su recién estrenado Ha Ha He, incluyendo ‘Irrational Friend’, ‘I am a chicken’ o ‘Fry Me’. Con este último tema, incluyendo un momento bajo-batería de lo más killer y un final apoteósico con tensión acumulada, la Wah Wah explotó en vítores, demostrando la buena impresión que causaron en el público.
En definitiva, ir a un directo de Mourn es darse cuenta de que el hype está justificado. Es darse cuenta de que Mourn no sólo son caras jóvenes tocando. Es darse cuenta de que no sólo son “las hijas de The New Raemon” (presente, por cierto, en el concierto). Es darse cuenta de que se están consolidando como banda a un ritmo brutal, y parece que esto es sólo el principio. Habrá que seguirles de cerca.
Reportaje fotográfico completo por Xus Arcas en Flickr.