Guidance es el sexto álbum de Russian Circles. Tres años después de Memorial, los de Chicago vuelven y en El Ukelele lo analizamos para ti.
Mes de agosto. Todo cristo pensando en las vacaciones, en desconectar del curro y/o estudios, ir a la playa (o a la montaña), quizá un viajecito (¡qué coño, para eso trabajamos!, ¿no?), y van los Russian Circles y te sacan un álbum. Quizá uno pensaría que no es la mejor época para vender discos, pero ése es un pensamiento viejuno: ya no hay buenas épocas para vender discos.
Personalmente, me encanta disfrutar de cosas nuevas cuando me voy de vacaciones. Quizá sea la sensación de ir a un sitio donde nunca has estado mientras escuchas algo que nunca has oído. Esa maravillosa sensación de descubrir cosas nuevas. Así fue como fui descubriendo los nuevos temas de Russian Circles, incluidos en Guidance.
Cuatro minutos exactos dura ‘Asa’, el tema encargado de abrir el disco, casi a modo de intro larga. Destaca por su belleza y armonía y se encarga de mecerte suavemente y adentrarte en el disco. Te das cuenta cuando tu cabeza empieza a balancear adelante y atrás al ritmo del redoble (casi parece interminable) que une ‘Asa’ con ‘Vorel’. Ya estás dentro y se ha desencadenado la tormenta eléctrica. Los cambios son constantes a lo largo de toda la canción y el protagonismo va pasando de los riffs de Mike Sullivan a la elasticidad del bajo de Brian Cook y la contundencia en el ritmo que marca Dave Turncrantz. Potencia post-metal.
No hay tiempo para silencios en Guidance. ‘Vorel’ se encadena y se confunde con el principio de ‘Mota’. La contundencia da paso a la harmonía y Turncrantz destaca sobre sus compañeros con una batería sobresaliente, exquisita. Hacia el ecuador del tema vuelve la contundencia habitual de los Russian Circles y explota hasta llegar a su fin. Como si del fin de una tormenta (dulce tormenta) se tratara, llega la calma para que ‘Afrika’ entre en escena.
Aquí acaba la parte más interesante del disco. La otra mitad de Guidance no llega a ser tan atractiva, pero tampoco decepcionante, ni mucho menos. ‘Overboard’ es una pieza intimista, calmada, casi como un interludio largo en el que la atmósfera es un todo. Aunque si pensabas que a partir de aquí todo iba a ser paz, estás más que equivocado. ‘Calla’ es una de las canciones más crudas del disco, con unas guitarras afiladas y contundentes. ‘Lisboa’ es la encargada de cerrar Guidance, un disco notable de los de Chicago, que con toda probabilidad defenderán en España a principios del año que viene.
Esperábamos un nuevo disco de Russian Circles con muchas expectativas y no nos han defraudado. Con un sonido evolucionado pero reconocible, el trío sigue creciendo en calidad y fama, algo que desgraciadamente no suele ir de la mano. En Guidance demuestran que son una de las pocas bandas en la actualidad capaces de crear melodías brillantes y paisajísticas y desarrollarlas hasta acabar en unos muros de metal (o post-metal, en este caso).
Ya desde aquí avisamos que estará copando las primeras plazas de las listas de mejores discos del año, así que no esperes a entonces a descubrirlo.
