El recién nacido sello barcelonés Villano Records celebró este sábado pasado su presentación en sociedad con la Antichristmas Garage Night, en la que actuaron The Saurs, Thee MVPs y Mujeres.
El cartel, aunque tenia el garage como eje central, contó con variedad propuestas puesto que incorporaba dos grupos nacionales (veteranos y promesas) y uno internacional. La larga bóveda de cañón que forma el sótano de la sala Sidecar y su minúsculo escenario, se prestan como un ambiente excelente para este tipo de recitales, así que no podíamos mas que esperar una velada fantástica esa noche.
The Saurs
Abrían la noche The Saurs, el trío de garage barcelonés que mas esta dando que hablar últimamente. Flamantes ganadores de la primera edición del Bala Perduda, recientes conquistadores de la península y objeto de críticas que sacarían los colores a cualquiera. Con estas credenciales se presentaban Engui (guitarra), Sueiro (guitarra) y Alejandro (batería) a Sidecar, una vieja conocida para ellos, para reafirmarse como una de las revelaciónes del año. El público, tímido al principio, fue llenando la sala poco a poco y se mostró muy receptivo con la breve, pero intensa actuación que ofrecieron. Aún así, los noté menos sueltos que en otras ocasiones, quizás debido al tute que llevan durante este otoño. Aunque el setlist elegido presentaba bastantes diferencias respecto a la última vez que tuve ocasión de verlos, fue muy interesante y acertado, y demostró que eso de “promesas” cada vez queda mas atrás: temas variados, pasando por sus hits y sin abusar de cañonazos “garageros”. Las miradas (y ausencia de ellas), gestos y guiños que se sucedieron durante toda la actuación, hicieron presente que, mas que un grupo de músicos (que también), son un grupo de amigos, y eso no hay libro ni conservatorio que lo enseñe.
Momento: Ese “Ain”t no deal” final que nunca decepciona.
Thee MVPs
Le tocaba el turno a los excéntricos y desconocidos Thee MVPs. Venidos desde Londres para la ocasión, visitaban por primera vez Barcelona gracias a la buena voluntad de unos pocos; que gusto da cuando las cosas se hacen entre amigos. Nada mas subir al escenario ya pudimos comprobar que cumplían con todos los requisitos que una banda de garage puede desear: guitarras sobaqueras, berridos guturales y una puesta en escena ecléctica. Desde el primer momento se ganaron la atención del público y lo supieron aprovechar, interactuando y haciéndonos mover de todas las maneras posibles. Su garage-punk, aliñado con melodías pegadizas se materializa en temas muy bailables que recuerdan a Black Lips y como no, a Thee Oh Sees, a los cuales homenajearon al interpretar un cover de una de sus canciones. Pasada la primera mitad de la actuación, el éxtasis alcanzó ese punto de inflexión que en ocasiones se da en conciertos de este tipo, en el cual el escenario hace las veces de lámpara en una noche de verano, atrayendo a la fauna que allí se encontraba, para formar una gran pogo que duraría hasta el final de la noche, y que contribuyó a que los británicos se crecieran todavía mas. Creo que no solo hablo por mi al decir que Thee MVPs convencieron, y mucho. No les perdais de vista.
Momento: Pablo Picapiedra a la batería.
Mujeres
Y llegó el turno de los veteranos de la noche: Mujeres. Con un comienzo algo frío, rápidamente se pusieron en situación, animando a un público al que no le costó mucho engancharse gracias al magnifico calentamiento previo y que se mostró entregado durante todo el concierto. Ritmos de bajo que nos evocaban a las playas de “Big Sur”, guitarras reverberadas y la voz de Yago surfeando por encima de los riffs, crearon una ola rítmica de la que era muy difícil escapar, y que acabó haciendo bailar tanto a los fans de primeras filas como a los incautos que se habían dejado caer por la Sidecar esa noche. Teniendo en cuenta la amplia discografía que cargan a sus espaldas y la variedad de estilos con los que han flirteado, crear un setlist que condense los deseos de los componentes y los anhelos del público puede llegar a ser un verdadero quebradero de cabeza. Aún así, los catalanes salieron airosos del quite y contentaron tanto a fans acérrimos como a novatos con un setlist plagado de sus mejores clásicos y regado con temas mas bailables, culminando con la traca final de “Aquellos Ojos” y “Blood Meridian”. Cuando un grupo cuenta con una base sólida de fans, se nota tanto para bien como para mal,y en el caso de Mujeres el hecho de tocar en casa no hizo mas que poner el broche a una actuación redonda: peticiones de temas, canciones coreadas, complicidad con el público… Mujeres quisieron y se dejaron querer.
Momento: ¡Aaaaaqueeeeellooooos Ojos Turbios!