Hay grupos que, no se sabe muy bien por qué, les cuesta llegar al número de seguidores que merecen. De ésta teoría excluyo, por motivos obvios, a aquellos que no lo merecen. Hablo de esos grupos que molan, que tienen buenas canciones y directos potentes. Pasan los años, acumulan discos en el mercado y parece que no, que no acaban de conseguirlo.
Es muy probable que gran parte de culpa de esto sea nuestra, de los medios (hablo en general porque si quien me está leyendo es un lector habitual de El Ukelele, sabrá de sobras que aquí no nos cerramos a estilos ni hablamos sólo de grupos mega-conocidos). Es más fácil y rentable hablar de grupos consagrados y conocidos por la masa que pararse a observar entre todo el mercado y apartar la paja. De actuar todos así, correríamos el riesgo de no dar al lector algo diferente, pero sobretodo nos perderíamos bandas como la que hoy nos ocupa.
Hace unas semanas, Ornamento y Delito volvían a escena con “El Espíritu Objetivo” (2014, Limbo Starr). 11 nuevos cortes con unas letras afiladas, a las que nos tiene acostumbrado G.G. Quintanilla y un sonido post-punk marca de la casa.
Como es habitual en ellos, “El Espíritu Objetivo” tiene un marcado contenido político, y cuando digo habitual me refiero a que no es de las bandas que ahora, de repente con la crisis les ha dado por hacerlo. No, esto era ya su seña de identidad. Pero además de unas letras afiladas que tiran a dar encontramos unas canciones oscuras de corte pop. En éste disco, encontraremos, a diferencia de sus anteriores trabajos, algunos temas más electrónicos y bailables. Eso sí, sin perder un ápice de su esencia, bailará pero con las mandíbulas y los puños apretados.
Si bien hay algunos cortes que son más fáciles en su primera escucha como ‘Carnaval Armado’, ‘Laissez Faire’, ‘Siamés’ o ‘Radio’ (tema extraído de su segundo trabajo con Limbo Starr fechado en 2008, “O+D”) es un disco que merece la pena prestarle toda la atención para no pasar por alto joyas como ‘Zona Algo Más’.
Esperemos que con “El Espíritu Objetivo”, Ornamento y Delito lleguen a ese público que aún no les conoce y puedan así ocupar el lugar que merecen. Por el bien de todos.
