China quiere crear un orden internacional junto a Rusia. “En una dirección más justa y racional”, dijeron diplomáticos de Pekín antes de una reunión entre los líderes de ambos países esta semana. Tras las tensas relaciones durante la Guerra Fría, China y Rusia se han acercado en los últimos años para contrarrestar el dominio de Estados Unidos. Con los países asiáticos, Rusia trata de estrechar lazos, especialmente con China, tras las sanciones sin precedentes de los países occidentales por la guerra de Ucrania. Pekín no condenó la invasión y criticó las sanciones occidentales contra Moscú, así como la venta de armas a Kiev.
Los principales puntos de inflexión en el pensamiento de China al respecto son:
Las naciones occidentales deben ser conscientes del principio de seguridad indivisible, que sostiene que la seguridad de un país no se logrará a expensas de la seguridad de otro país. Y este principio debe convertirse en la base de la nueva arquitectura de seguridad internacional.
- China es como Europa, que quiere que la guerra en Ucrania termine cuanto antes, pero el conflicto continúa debido a la implicación de Estados Unidos.
- Es esencial abandonar los conceptos de la Guerra Fría y las ideas colectivas y pasar a un sistema internacional multipolar y práctico.
- La situación de Ucrania y Taiwán es incomparable porque Ucrania es un país soberano que ha sido atacado por otros países. Al mismo tiempo, Taiwán forma parte de China y es reconocido en todo el mundo.
- China no apoya las sanciones unilaterales de Occidente contra Rusia porque Estados Unidos utiliza estas sanciones como medio para ampliar su influencia y acceso geoespacial.
Cálculos geográficos chinos:
Es justo decir que la postura de China en la guerra ruso-ucraniana no tiene nada que ver con Ucrania. Pero debe verse a través de la lente de la competencia geoestratégica entre China y Estados Unidos. El futuro de Ucrania es una cuestión secundaria. Por eso es poco probable que China participe en las sanciones contra Rusia: no porque Pekín apoye la agresión militar ucraniana en Ucrania. Pero sumarse a esas sanciones significaría rendirse a la voluntad de Estados Unidos, algo que Pekín no puede aceptar.
Por otra parte, China parece dispuesta a desempeñar un papel de mediación en un alto el fuego en Ucrania. Pero quiere hacerlo en pie de igualdad con Estados Unidos y la Unión Europea, posiblemente sólo cuando Pekín llegue a un acuerdo con Washington y Bruselas. Esto hace que China parezca reacia a apoyar plenamente a cualquiera de los dos bandos en la guerra ruso-ucraniana. Los cálculos geopolíticos llevan a calibrar cuidadosamente las respuestas con una implicación mínima.
Relaciones chino-occidentales:
China está dispuesta a trabajar con Rusia con el objetivo de promover los beneficios mutuos y una visión compartida de un orden mundial más justo, dijo Yang Jiechi, el principal funcionario de política exterior del país.
China está dispuesta a trabajar con Rusia para cumplir la cooperación estratégica de alto nivel entre los dos países con nuevos significados para proteger el beneficio mutuo y promover un orden mundial más justo y razonable, según dijo Yang en Pekín. Yang, que fue ministro de Asuntos Exteriores de China de 2007 a 2013, se congratuló de la dimisión del embajador ruso Andrey Denisov y elogió el apoyo a las relaciones bilaterales entre Rusia y China.
Dijo que su relación continuaba en el camino correcto bajo el presidente Xi Jinping y Vladimir Putin, con los dos países apoyándose mutuamente para mantener los intereses internacionales y la cooperación.
Yang dijo que China está dispuesta a cooperar con Rusia para seguir implementando el espíritu de la cooperación estratégica de alto nivel entre los dos países. Proteger los intereses mutuos de ambas partes y promover el desarrollo del orden internacional en una dirección más justa y racional. China y Rusia se han acercado en los últimos años en el marco de la alianza “Sin Límites”, que sirvió de contrapeso a la supremacía y hegemonía de Estados Unidos.