«Queríamos festejar quince años de Musik pour the Ratas, rememorarlo en clubs, recordar lo que hacíamos en ese momento»
Cuando te plantean una entrevista con Glamour To Kill, al principio te entra el vértigo de enfrentarte a unas grandes estrellas del electroclash, pero Antonio, Juan y Luis son tan excelentes personas como artistas y enseguida me acogieron en su inagotable conversación (sobre Berlín, la vida, la música), tan diversa como interesante… Glamour To Kill actuaron en la Sala Maravillas, dentro de la fiesta Tsunami Genderfluid, para celebrar quince años de su primer disco, Musik pour the Ratas. Aquí tenéis un intento de transcripción de lo que ocurrió en ese ratito.
Alaska y Dinarama, Fangoria, McNamara… Estoy ante una de las piedras angulares del glam rock / punk en España y estoy un poco nerviosa…
Juan: No, mujer. Nosotros no tenemos la consciencia de ser una piedra angular y nos encanta que nos lo digas. Hemos podido hacer una música que ha llegado a la gente y nuestro trabajo ha llegado a quienes queríamos llegar. Así que, gracias por tu piropo.
Luis: Todos venimos de diferentes aspectos artísticos y con diferentes influencias. Cuando llegué en los ochenta a Madrid yo quería montar el escándalo. Hoy hay demasiada gente montando el escándalo y ya no se destaca.
Juan: Además, las motivaciones son diferentes. Y cuenta mucho el talento, en este caso la rebeldía más el talento hizo surgir Glamour To Kill.
Antonio: Cuando hicimos este proyecto estábamos en Berlin y allí funcionaba. Nos encontrábamos como en casa con todo lo que ocurría ahí, el sonido electroclash, nos gustaba. Empezamos a tocar en los antros berlineses de la subcultura, con mucha actitud.
Luis: Queríamos romper un poco la figura del DJ.
Juan: Claro, el DJ era parte de las fiestas y, de repente, entraron en escena Glamour To Kill y el DJ, por un rato, dejaba paso a una banda.
Luis: Los ochenta siempre serán una referencia para la estética de la música, porque en esa época el artista era muy importante. El conjunto de los tres es una mezcla de rock, disco… Y esa actitud a la que se refiere Antonio, que es lo que encontramos en Berlín
Antonio: Al venir a España, cuando nos trajo Subterfuge, después de pasar dos o tres años sumergidos en ese ambiente berlinés, nos sorprendió cómo la gente acogía nuestro directo.
Juan: Nos sorprendió que nos conocieran.
Luis: Berlín funcionó un poco como escaparate. No había redes sociales, la gente nos conocía de vernos en otros shows, de salir de fiesta…
Juan: Y nos anunciaban como la banda berlinesa Glamour To Kill, no sabían que éramos españoles.
Luis: Ahora no hay un sonido berlinés propiamente dicho, no hay un movimiento.
Juan: El electroclash se ha convertido en un clásico, pero no es tan innovador.
Luis: Ha evolucionado y Berlín era un punto de encuentro.
Antonio: Y la gente tenía muchas ganas de colaborar y de hacer cosas.
Habéis vuelto para recrear vuestro primer disco, Musik pour the Ratas, ¿no nacisteis para ser discretas?
Luis: Eso está claro, no nos arrepentimos ni lo seremos nunca… Queríamos festejar quince años de este álbum, rememorarlo en clubs, recordar lo que hacíamos en ese momento.
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Musik pour the Ratas evidentemente y de forma explícita tiene, en el título, los idiomas que utilizáis en el disco, y se me ocurren varias preguntas.
- ¿Es importante para vosotros el idioma o es un instrumento más, como otro cualquiera?
Luis: Es lo que nos pasaba en Berlín, que hablábamos en varios idiomas.
Antonio: Como intérprete (me considero más intérprete que cantante), para mí cada idioma tiene diferentes matices.
Juan: La cadencia de la ciudad te obliga a comunicarte en diferentes idiomas.
- Cómo concebís la internacionalización en vuestro proyecto musical
Antonio: Acabas transcribiendo tu día a día, y, como decimos, Berlín es muy internacional y este disco es muy autobiográfico.
Luis: También supuso un cierto renacer, yo venía de varios grupos, de ser compositor… Llegué a Berlín sin enseñar mi currículum, y era un reto. Incluso cantando la canción “Clon fashion”, que no tiene estribillo cantable, al terminar la canción, la gente se acercaba a cantarnos la estrofa.
Por cierto, ahora que comentas esa canción, en algún momento en vez de decir «clon» decís «clown», ¿verdad?
Antonio: Sí, sí, es un juego de palabras. Siguiendo con lo que contábamos, llegar a Berlín nos daba la libertad de no depender de lo que habíamos hecho hasta ese momento y empezar de nuevo.
Luis: La libertad que te daba no llevar tarjeta de visita.
Juan: Antonio era un súper influencer que dirían ahora, era muy conocido, Luis venia de tocar con Alaska y Dinarama y con Fabio McNamara, entre otras bandas, yo también había hecho mis cosas, pero al estar en un sitio en donde nadie te conoce no sientes que tienes que estar a la altura de nada y teníamos que demostrarlo todo. Con esto salíamos al escenario con un puntazo y sin ningún complejo.
Luis: Salíamos a matar.
Juan: Y nos lo pasábamos… ¡Madre mía!
Luis: Hemos hecho cosas que han merecido la pena, casi que estamos pensando en hacer un libro contando nuestra historia. Hay muchas anécdotas. Éramos tres españoles en Alemania, pero no creían que fuésemos españoles.
Qué os ha dado Berlín que jamás podríais haber encontrado en Madrid
Antonio: Escenario, posibilidades, encuentros, otras culturas…
Luis: Es lo que pasaba en Berlín, ahora no pasa, la escena berlinesa musical ha cambiado.
Juan: La gente se ha ido pero la ciudad sigue siendo un referente cultural… Muchos barrios han cambiado, se han aburguesado, se ha encarecido…
¿Qué otras manifestaciones artísticas desarrolláis? (comienzan a enseñarme sus obras en instagram, por cierto, podéis seguirles en @luismiguelezofficial, @antuan_culebras y @juantormento)
Juan: Yo soy pintor y, aparte tengo un negocio que tiene que ver con el mundo del deporte.
Antonio: Yo estoy haciendo cosas de artes plásticas.
Luis: He estado conectado con muchos pintores, aunque no me considere pintor, también pinto.
Juan: Luis es muy buen fotógrafo, también.
¿Qué os gustaría que os preguntaran y nunca os han preguntado?
Juan: Es que nos han preguntado cada cosa…
Luis: ¿Por qué no me he cambiado de sexo? (risas) No, estoy de broma…
¿Qué estáis hartos de responder?
Luis: ¿Qué tiene Berlín que no tenga otro lugar?
Vaya…
Juan: Asumes que hay que contestarla, al final… Por lo general siempre damos con gente que se interesa y hace preguntas inteligentes. Otras veces me han hecho preguntas incómodas que no me gusta responder, por ejemplo, sobre la vida de otras personas.
¿Qué nos vamos a encontrar en este nuevo espectáculo?
Antonio: Prácticamente el disco entero de Musik pour the Ratas. Que es a lo que nosotros nos gusta hacer: música para las ratas. Que el público se mezcle con nosotros, con el espectáculo.
Luis: Podemos encontrarnos cualquier cosa. No tenemos escenografía ni audiovisuales, es un concierto electropunk.
Juan: Sabemos cómo empieza pero no cómo acaba.
Luis: Todo esto ha surgido de manera espontánea, Rocío (vocalista de Las Chillers) ha sido la culpable de todo. Nosotros teníamos una idea de celebrar quince años de este primer disco.
¿Tendremos disco nuevo?
Luis: Estamos preparando cosas nuevas y queremos sacar una canción pronto… Los tiempos han cambiado y sacar un disco de diez canciones ahora mismo no lo tenemos en mente, pero haremos algo. Aunque musicalmente tenemos material, ahora mismo nos apetece respetar más nuestras vidas personales y no queremos ir rápido, estamos en otro momento.