The National – Fotografía SOS 4.8

El SOS 4.8 cerró su octava edición con un escenario Radio 3 que sonó mejor que en la primera jornada y las destacadas actuaciones de The National, Temples, Glass Animals, los granadinos Lori Meyers y la sesión de 2ManyDjs


La segunda jornada se presentó con unos ‘Aperitivos SOS’ muy apetecibles: Correos, Alborotador Gomasio Los Fresones Rebeldes. Seguro que no fui el único que se extrañó al ver que una banda con tanta trayectoria como Los Fresones Rebeldes se quedara fuera del recinto, aunque después me alegré de ver el llenazo de la Plaza de la Universidad para verlos, en parte, desde donde me encontraba podía apreciar la cara de sufrimiento de la cantante mientras actuaba bajo ese sol inhumano (alrededor de 40º), son músicos, pero también personas.

Llego a La Fica para ver a Mi Capitán, un proyecto bastante interesante formado por integrantes de Love of Lesbian, Standstill (acaban de anunciar un parón indefinido) y Egon Soda. Con estos veteranos las expectativas estaban altas, y podemos decir que cumplieron sonando correctamente aunque se les atravesara una canción que, tras tres intentos, no pudieron completar por algún fallo en el sintetizador o en las melodías pregrabadas, pasando a compensarlo directamente con “Es Suave La Voz”. Mención especial para Ricky a la pandereta, ¡cómo lo vive!.

Habiamos prometido a Nunatak ir a verles casi a primera hora de la tarde. Y allí nos plantamos, a escuchar esas canciones épicas llenas de folk, Adrián, el cantante, sonaba quizás un poco flojo, tal vez el micro. Apenas media hora de actuación en el escenario Jäggermeister que sirvió para extender un poco más las alas de esta formación que está empezando a despegar con confirmaciones en grandes festivales nacionales. Al mismo tiempo tenía lugar la actuación de El Último Vecino en el Radio 3, un poco de synthpop con aires de Joy Division que atrajo a bastantes seguidores con ganas de bailar a primera hora de la tarde ¿Le prestaría Óscar (Varry Brava) aquellos pantalones?

Dorian han sorprendido con la publicación de su álbum recopilatorio “Diez años y un día” (2015) al cambiar totalmente el alma de sus temas sustituyendo los sintetizadores y los ritmos bailables por un cuarteto de cuerda (con violín y viola, e incluso guitarra acústica) que otorga otra dimensión a las canciones ya conocidas por todos. En directo consiguieron trasladar el espíritu del disco sin olvidar que los amantes del grupo también quieren disfrutar de esa música que ellos saben hacer tan bien, por eso comienzan su espectáculo con versiones más suaves de canciones como “Verte amanecer”, pero lo terminan con la versión más clásica y “saltable” de “Tormenta de arena”, en un equilibrio perfecto entre preciosismo musical y pop electrónico.

“Yo he venido a que me den patadas en los cojones”, eso decía el que estaba a mi lado mientras esperábamos a Los Punsetes. Con la inmóvil puesta en escena de la cantante da comienzo un recital de atrevidas letras y distorsiones, los madrileños venían para presentar su cuarto disco de estudio “LPIV” (2014). Unos minutos antes de acabar me dirijo al escenario principal para degustar la opción psicodélica de la noche, no suelen encontrarse apuestas así en el festival. La sencilla formación de Temples daba la sensación de que el escenario les iba a quedar grande, pero rápidamente cambió mi percepción, aún tenía en mente el concierto de aquella banda emergente por la que nadie apostaba en el FIB de 2013 bajo el sol de Benicàssim. Tras alguna foto que iba haciendo el cantante entre canciones, el trío británico presentó “Henry’s Cake”, tema que se incluirá en su próximo álbum y que dejaría buen sabor de boca a los que gustan de este estilo de música. Pero poco gustó que no terminaran “Shelter Song”, el grupo que actuaba a continuación esperaba subido al escenario para poder empezar, por lo que sólo tocaron 30 segundos, se lo perdonamos por ese espectacular final en “Mesmerise”.

Esa banda que esperaba para poder comenzar era Glass Animals, otro grupo grupo británico que, con tan sólo un Lp, dio otra de las sorpresas de la noche. Cuando un músico disfruta sobre el escenario se nota, los movimientos del cantante al ritmo de ese trip-hop enseguida movilizaron a los presentes con temas como “Gooey”, “Toes” o “Black Mambo”.

Lori Meyers – Fotografía SOS 4.8

Resultó sorprendente que Lori Meyers comenzaran con “Hostal Pimodán”, dando la bienvenida a los asistentes, con algunos altibajos recorrieron sus discos anteriores, incluso rescataron temas que apenas se pueden oír en sus directos como “Funcionará”, “El gallo ventrílocuo”, “Viaje de estudios” o la genialérrima “Mujer esponja”. El semicírculo blanco y negro que les había acompañado durante la gira ahora había sido sustituido por una pantalla que reflejaba en imágenes las letras de las canciones. Rompiendo su tradición (que consiste en terminar los conciertos con “Mi realidad” o con “Alta Fidelidad”) se despidieron con “Emborracharme”, canción de su último disco, Impronta” (2013), que ha conseguido rápidamente convertirse en himno.

The National – Fotografía SOS 4.8

Antes de coger sitio para el cabeza de cartel me quedé un rato para escuchar a los suecos I’m From Barcelona, sólo con ver todos los que salieron al escenario piensas “¡pero si son más que Arcade Fire!”, algunos hasta se tuvieron que sentar a la derecha del escenario mientras se organizaban. Nada más empezar suena el famoso single que escucharía todo el mundo antes del festival, “Violins”, provocando una fiesta instantánea. Son muy buenos, pero al fin y al cabo nada del otro mundo, otro grupo pop con toques alegres de folk. De la fiesta me paso al funeral (dramatizando un poco), tenía muchas ganas de volver a ver a The National. Los de Ohio salen con su elegante vestuario y Matt, con un peinado más descuidado, comienza a cantar “Don’t Swallow The Cap”. No sé si este hombre sufrirá de verdad, pero siempre consigue transmitirme algo con sus letras, sus gritos de rabia contenida (como en “Squalor Victoria”) y unos cuidados visuales que parecen ir de la mano de los temas. Puede que cortes como “Slow Show” supieran a poco para aquellos que ya los han visto en otras ocasiones con colaboraciones, pero fue imposible negarle el sobresaliente a un espectáculo en el que Matt volvió a mezclarse, como de costumbre, entre el público con “Terrible Love“, demostrando que no sólo hacen conciertos para espacios cerrados.

Mientras The National seguían con su concierto en el escenario Estrella Levante, el célebre productor francés Étienne de Crécy se iniciaba con su espectáculo french house Super Discount acompañado de dos artistas que permanecían ocultos en la sombra del escenario y unas letras luminiscentes de neón con el nombre del show que hacían a la vez de maestros de ceremonias. Se puede apreciar con dificultad la calidad de un DJ que dejó todo el peso en unos apasionantes juegos de luces y en sus propias producciones hiladas con continuidad que consiguieron hacer bailar al público. Entre los temas no faltaron joyas de Super Discount 3 como son “You”, “WTF” o “Hashtag My Ass”, e incluso se atrevió con temas de trabajos pasados como “Overnet”.

Tras Étienne, la cara amarga la pusieron los alemanes Digitalism, que esta vez vinieron al SOS 4.8 en formato DJ Set. Pese a la gran calidad que atesoran sus producciones en sus LPs “Idealism” (2012) y “I Love You, Dude” (2011), el dúo no llega a funcionar como djs. Su sesión para el festival fue cargada de temas poco sorprendentes y los cortes entre canción y canción se vertían como un jarro de agua fría sobre los asistentes. Aun así, incluso cayendo en clásicos siempre efectivos como el famoso “Do It Again” de The Chemical Brothers, la sesión conseguía mantener bailando a un público ya cansado. Por suerte, serían los belgas los que cerrasen el festival. 2ManyDJs pueden venir a Murcia todas las veces que quieran, es más, no deberían faltar jamás. Los años pueden pasar, ellos pueden repetir repertorio y no eludir jamás su homenaje ibérico metiendo el irónico corte de Chimo Bayo a mitad de sesión. Su maestría en las cabinas quedó manifiesta, montando un orgía sonora imparable con una fuerza brutal, una forma muy bonita de que los fans les perdonemos el desplante que hicieron cuando estuvieron hace 6 meses en el B-Side Festival. Y nosotros perdonamos, vaya si perdonamos. Pueden recurrir a “Lotus” de Mumbai Science o “The Beach” de New Order como siempre, pero aquel chute de adrenalina nos permitió seguir bailando incluso con los pies destrozados. Y vaya si funcionó que, cuando su música se paró, nuestros cuerpos quedaron vacíos esperando a que vuelva a ser mayo en 2016.

Colaboraciones: Aída Cordero Jose David Gorzas

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *