El cuarteto neoyorquino actuó el pasado 14 de febrero en la sala Arena de Madrid para presentar las canciones de su primer álbum VHS, que incluye su gran éxito ‘Renegades’.
.Texto: Javier Lorbada
Fotografía: Eva Sanabria
Venían avalados por el éxito internacional, suenan bastante en las radios, y en la entrada de la sala Arena había carteles de Los 40 Principales, pero dentro el ambiente era un tanto gélido: no más de 300 personas. Bueno, era domingo, San Valentín, y dentro casi hacía el mismo frío que fuera. Aún así, los X Ambassadors salieron como si nada, con algo de retraso pero dispuestos a darlo todo ante sus escasos y entregados fans. Lo suyo es puritito rock de estadio, que para algo han sido teloneros de Muse, The Lumineers y Panic! At The Disco. Descubiertos por Imagine Dragons y compañeros de escudería discográfica, tienen cualidades para acabar siendo una de las bandas triunfadoras en nuestros festivales para esta temporada.
El grupo está liderado por los hermanos Harris: Sam al micrófono, guitarra, bajo y ¡saxo!, y Casey, que es ciego de nacimiento, a los teclados. Sam tiene imagen y pose de estrella del rock y se mueve por el escenario con la naturalidad del que sabe actuar para las decenas de móviles que le están grabando. Canta con fuerza y tiene una voz potente que se defiende a la perfección también en los falsetes. Resulta cercano y empieza hablando algo de español. Juguetea con los samplers y se hace sus propios coros cuando los necesita pero su música no es tan sencilla como parece. A veces suenan como los últimos herederos de Rage Against The Machine mientras en otras se notan ciertas influencias del free jazz lo que les convierte en uno de los grupo actuales más raros de las listas de ventas.
Hicieron su breve repertorio en poco más de una hora, en el que no podía faltar ‘Renegades’, todo un jitazo de estribillo demoledor que no puedes dejar de tararear, aunque a veces te confundas, y acabes casi cantando el ‘Aserejé’. Creo que un mash up entre las dos quedaría perfecto. Habrá que estar atentos a su evolución. Desde luego, muestran una credibilidad y un afán de compromiso social de los que siempre se agradece, además de hacer temas algo más modernos y arriesgados que los de los muchos grupos comerciales que arrasan en todas partes.