Jake Bugg fue uno de los grandes agitadores de la escena musical en 2012 con un gran disco de debut, al que siguió un menos inspirado Shangri La. Tras un largo descanso, está de vuelta.
Que Jake Bugg esté vivo no es ninguna sorpresa, que tenga “todavía” 22 años sí. El artista británico irrumpió con muchísima fuerza en el mundo de la música hace cuatro años con un buen álbum homónimo. Su continuación, apresurada a todas luces, enterró algunas de las esperanzas depositadas en él, pero ‘On My One’ nos presenta a un Jake más maduro y más consciente de la voracidad de la industria musical.
La aparición del tema a estas alturas del año, y de fechas de conciertos, hace presagiar que el nuevo disco del de Nottingham llegará en el presente 2016, y si sigue las líneas de ‘On My One’, vamos a disfrutar de él. Nos enfrentamos a una canción oscura, autobiográfica, y a la que se le ha añadido el groove como componente destacado:
La diferencia entre este disco y su predecesor es el haberle añadido ritmos grooves. Hay canciones que se pueden bailar, y eso es debido a la influencia de los temas setenteros que he estado escuchando sobre todo en Smooth Radio.
Así ha descrito Jake Bugg lo que va a ser su tercer disco, y en parte, lo que es ‘On My One’. La influencia del blues también es notable en todos los aspectos, tanto instrumentales como vocales.