“El último esfuerzo de Manos de Topo”, así se titula el último vídeo de los catalanes y quizá el que más expectación y controversia ha generado en toda su carrera. Tras la publicación en las redes sociales de una supuesta agresión a Miguel Ángel Blanca saltaba la alarma.
¿Tú también odias a Manos de Topo? ¿Formas parte del grupo de Facebook “Arrancarle las cuerdas vocales al cantante de Manos de Topo”? Pues ha llegado el momento que tanto esperabas, Miguel Ángel Blanca recibe su merecido por tantos años “cantando”.
En el nuevo vídeo, dirigido por la propia banda, somos testigos de la reacción de los jóvenes barceloneses al descubrir el singular modo de cantar de Miguel Ángel, y como no podría ser de otro modo las reacciones no son demasiado buenas, desembocando en un escenario propio de una snuff movie, en la que el cantante recibe todo tipo de vejaciones.
El domingo Manos de Topo publicaba en sus redes sociales una foto de Miguel Ángel con la cara magullada y ensangrentada, contaban que había sufrido una agresión por “cantar tan mal”, a los pocos minutos la foto desapareció dejándonos a todos con la duda de si la paliza había sido real. Hoy mismo Manos de Topo han publicado este comunicado:
La mayoría de cosas que empiezan con un chiste acaban en tragedia. Y al revés. El caso es que salimos a la calle un sábado por la noche a preguntar a la gente qué opinaba de Manos de Topo y la aventura no acabó demasiado bien…
Seguimos siendo Manos de Topo. Seguimos cantándole a la tragicomedia. No creemos que haya cosas tan importantes en la vida como para no reírnos de ella. Un abrazo de oso a los que lo hayan pasado muy muy mal por culpa de esa foto. Ceci n’est pas une pipe. Un saludo también a los que se habían hecho ilusiones con la agresión pero tienen que saber que nuestro cantante está en perfecto estado de salud; estamos curtidos por todos los golpes que da el indie. A todos vosotros, amigos, solo os pedimos un último esfuerzo. Gracias.
Aquí te dejamos con “El último esfuerzo de Manos de Topo”, es importante verlo entero.