Si fue en enero cuando en El Ukelele conocimos las bondades de Matuja, ahora llega un nuevo proyecto de su mitad: Mezcalina Jones. Junto con otro par de dos Mind Control acaban de publicar The Sphase, su primer ep. El próximo 18 de noviembre estarán en Proyecto Waikiki (anticipadas aquí), por lo que hemos estado hablando con Rubén, su cantante.
Amigo, ¿bajo que estupefacientes estabais cuando decidisteis que ‘Mezcalina Jones‘ sería vuestra marca distintiva? (que conste que me parece fantabuloso)
Rubén: Pues la verdad es que llevábamos semanas pensando en nombres que pegasen con el sonido en el que estábamos trabajando, y había de todo…Desde The Sphase, que acabó siendo el nombre del EP, hasta Nabosaurio… El caso es que finalmente dudábamos entre Mezcalina Jones y Ketamina Johnson, nuestro alter ego.
Para quien no se conozca vuestra historia, ¿de dónde venís y cómo surgió Mezcalina Jones?
Rubén: Pues a ver, conocí a Mind Control hace ya casi cuatro años, cuando tocaba la batería en un grupo de thrash metal, en un concurso de bandas. Me molaron mucho y nuestros caminos volvieron a cruzarse cuando Matuja y Mind Control comenzaron a compartir local de ensayo en verano de 2014. El roce hace el cariño y acabamos quedando para jammear la mitad de cada grupo de vez en cuando, hasta que vimos que teníamos algo entre manos y decidimos darle cera…Y pulirla bien.
En vuestras fotografías promocionales vestís de naranja y azul como si de unos niños tiroleses terroríficos se tratase. Luego hemos visto que en directo también seguís uniformados. ¿Cuestión de marketing?
Rubén: Creo que los colores llegaron antes que el nombre. La portada de Californication, agua y fuego, el kimono de Son Goku… ¡Era una combinación ganadora!
Hablando del directo, hemos oído que vuestra presentación fue una pasada. Contadnos qué va a encontrar el oyente activo en vuestros directos.
Rubén: La Siroco siempre ha sido nuestra casa, es una de las salas con el sonido más potente de Madrid. Teníamos que presentar The Sphase ahí y fue genial…La sala estaba hasta arriba. Aún estamos conociéndonos sobre el escenario pero hubo un salto del primer bolo al segundo, dos días después, así que para el tercero en Proyecto Waikiki habrá más caña aún.
Aunque vamos en sentido contrario a las agujas del reloj, ahora toca preguntar por vuestro primer trabajo, The Sphase. Contadnos sobre el proceso de creación.
Rubén: En cuanto al sonido, encontramos la combinación entre lo directo que era Mind Control, y la improvisación psicodélica de Matuja, siempre llevándolo por la línea progresiva y saliendo del 4/4, tenemos una especie de alergia a eso (risas).
Aprovechando que sólo son tres temas, vamos a hablar de cada uno de ellos. ¿Qué se esconde tras las iniciales ‘T.T.T.’?
Rubén: Cada uno te contestará una cosa. La canción se basa en el tren que es la vida, y las decisiones que tomas y te llevan a una estación u otra, por ello ‘T.T.T’ puede ser el sonido que hace una locomotora, si lo miras de lado parece un raíl, o puede ser que por el calor que pasamos en el local signifique “Todos tenemos tifus” (risas).
¿Qué se esconde tras ‘Naboo’?
Rubén: Esta va a sonar a coña pero hubo una época en la que nos dió por gritar “Nabo” continuamente (de ahí “Nabosaurio”), y la línea instrumental del tema nos sugería un paisaje submarino así que como frikazos de Star Wars atacamos por ahí.
¿Qué se esconde tras ‘1984’?¿Filo-sci-fi?
Rubén: Sin duda se trata del tema más directo del EP. Una canción musicalmente compuesta por Gon y Yorch, la parte mindcontrolera. La letra es pura conspiranoia, relacionando la novela de Orwell con todo lo que ocurre en la actualidad, terrorismo sin caras, la Clica, la ignorancia general…Habrá quien no sea fan de los guturales, pero lo pedía, literalmente, a gritos.
Hace unos días, entrevistando a BULTUR, nos recomendaron que os entrevistásemos. Casualidades de la vida. ¿Qué ambiente se respira dentro del rock madrileño/local?
Rubén: ¡Grandes Bultur! La escena rockera y musical en general del underground en Madrid está más viva que nunca. Hay auténticas bandazas que sabes que lo van a petar, o por musicazos o por directazos. Mola mucho ver cómo grupos con los que has tocado van subiendo en la interminable escalera hacia la superficie.
El próximo 18 de noviembre estaréis en una nueva edición de Proyecto Waikiki. ¿Qué os parecen este tipo de propuestas?¿Por qué ha de venir la gente a oíros tocar en directo?
Rubén: Con Matuja ya vivimos un Proyecto Waikiki y fue brutal. La Maravillas mola mucho, es la nueva Wurli en mi opinión. Aparte tocando con los Dinamita, que son colegas, puede liarse una buena allí. Hay muchos grupos que tocan en esa fecha al parecer, pero en ningún lado se va a liar una tan gorda como en Proyecto Waikiki.
Para terminar, ¿a quién os gustaría que entrevistásemos?
Rubén: El otro día tocamos con un grupo que definiría como una mezcla entre black metal y cumbia, Sapiensfilia. Una entrevista con esos chavales puede ser bombazo (risas).