Seis años han tenido que pasar para que la madrileña formación de cinematográfico nombre El Páramo publicase su segundo y esperado disco. Dicen que más vale una imagen que mil palabras y para ello su nueva portada. También dicen que un sonido dice mucho más que un matojo de frases hiladas. Atmósferas que pueden llevar a tu mente el rincón más oscuro o al desierto más luminoso. Y, por qué no, a su próximo concierto de presentación en la Sala El Sol este sábado 21 de junio. Antes estuvimos con ellos y nos contaron sobre sus próximos planes entre calamares y orejas a la plancha.
¿Quiénes sois, de dónde venís qué hacéis?
Somos El Páramo y nos juntamos hacia 2004. En un principio Santi y David estaban en otro grupo, Sou Edipo y ahí empezamos a hablar de hacer algo como El Páramo. Y cuando se empezó con ello, Jorge se unió al proyecto. Santi no se acababa de decidir, así que pasó un tiempo hasta que se formó el grupo de verdad.
¿De dónde viene vuestro nombre? ¿Por qué El Páramo?
Como hemos dicho anteriormente, entre ensayo y ensayo del anterior grupo teníamos esa idea. Era un nombre que nos gustaba. Iba perfecto para un grupo de stoner rock como se supone que somos nosotros. Viene de la segunda película de Mad Max, que se desarrolla en El Páramo. El nombre fue antes que el grupo, podemos decir.
La mitad del grupo compagináis este proyecto con otra formación, Adrift. Además, en pleno apogeo. ¿Cómo hacéis para compaginarlo?
Pues intentando distribuir los días de ensayo. Y estresándote también un poco (risas). Haciendo un poco de Tetris. Cada uno tocamos en otro grupo como Adrift, Toundra o Viva Honduras. A veces es un poco complicado pero se puede compaginar. Antes sí que había días fijos de ensayo en cada grupo y ahora solemos tener nuestros días, pero el truco está en tener comunicación. Gracias a whatsapp. (risas). Y con los conciertos, quien cierre fecha primero es quien se la queda, acoplándose los ensayos a esas actuaciones.
¿Cuáles son vuestras influencias? ¿Qué disco estáis escuchando ahora?
Como base para el grupo, la música de los setenta como Led Zeppelin, Black Sabbath, King Crimson o música actual como Kyuss, Colour Haze, Motorpsycho, etc. Y lo que escuchamos puede ser muy variopinto respecto a lo que tocamos. Hay ciertas cosas que sí que influyen en nuestra música pero otras no tienen nada que ver. Por ejemplo, Sergio es muy seguidor de Michael Jackson, mientras que Jorge está escuchando Young Widows o Swans.
Acabáis de sacar vuestro segundo disco, también homónimo como el primero. ¿Qué vamos a encontrar en él? ¿Alguna diferencia respecto al anterior?
Es una evolución del anterior. Está mejor grabado y tiene un mejor sonido. No hemos querido hacer un cambio drástico porque creemos que tampoco era necesario. Nos gusta lo que hacemos y no buscamos la innovación por la innovación. Desde el anterior disco han pasado seis años por lo que hay una evolución y un mayor conocimiento entre nosotros. La gran diferencia creemos que está en la grabación. Sigue siendo en directo, pero le hemos dado una mayor importancia. Se han cuidado los detalles como llevar los temas más cerrados al estudio. Este disco se lleva haciendo durante años y eso también se nota.
El disco ha sido masterizado por Frank Rotthier. Mezclado por James Protkin. ¿Cómo ha sido la experiencia?
Muy positiva. Frank (Rotthier) es amigo nuestro. Le conocimos cuando pasamos por Bélgica de gira con Adrift y desde entonces hemos mantenido el contacto. Siempre le ha gustado mucho El Páramo. Ahora se ha metido en el mundo de la grabación y estuvo detrás nuestra para que le mandáramos el disco. Se lo mandamos, lo mezcló y nos pareció genial. Enseguida entendió muy bien lo que queríamos hacer. La grabación la hicimos con Miguel Lorenzo en Béjar y con ese material pasó el filtro del crudo que venía de ella. Y de (James) Protkin ya teníamos referencias al haber trabajado con él anteriormente en Adrift. Sus precios son buenos y hace un muy buen trabajo. Muy profesional. Los tres sabían qué tenían que hacer en el momento en el que lo hicieron.
Me ha llamado la atención el diseño del disco.
Lo ha hecho Jorge. Es el que más guapo sale. (risas)
Aprovechando que tenemos aquí al artista, te preguntaremos por ello entonces.
No tiene más que lo que ves. Es la continuación del disco anterior. En el lateral de la portada hay una pieza que enlaza con el primer disco y este segundo trabajo sería como la siguiente pieza del puzzle. Son fotografías de Almería, un lugar que nos gusta mucho y que creemos que va muy bien para la idea de El Páramo. Un lugar árido pero con volcanes de colores. Una figura le enseña a otra lo que viene después. Un paisaje que evoca buenas sensaciones. Pero dejamos que a cada uno le evoque lo que quiera.
¿Un acorde vale más que mil palabras?
Pues en nuestro caso, sí. Nosotros no hablamos mucho ni con los títulos de los discos ni en el directo ni tampoco en las canciones. La música instrumental no necesita de más. Es escuchar, que te evoque y que viajes con ella. Las letras igual pueden condicionarte a ello.
Ahora que comentáis lo del viaje, si tuvierais que elegir un disco para ello, ¿cuál elegiríais?
Aparte de nuestro último trabajo (risas), cada uno creo que elegiríamos uno. Welcome to Sky Valley de Kyuss. O Uno de Raphael para cuando te dé el bajón (risas).
El próximo sábado estaréis en la sala El Sol presentando trabajo. ¿Qué más fechas tenéis a la vista?
Este pasado fin de semana estuvimos en A Coruña en el Mareira Fest. También estaremos en el Twister Open Air Festival de Leganés el 11 de julio, en el Brujas Festival de Daimiel en agosto y bajaremos a Canarias también en verano. Y luego estamos pendientes de más fechas. Ahora mismo tenemos muchas ganas de este concierto en Madrid este sábado 21 ya que es la presentación del trabajo.
Al hacer música instrumental, ¿creéis que se os cierran puertas por ello?
Creemos que ocurre al contrario. Las radios y público a los que vamos, tienen la música instrumental muy asimilada y no les supone ningún problema. Es más, al ser música instrumental no te cierras en ningún estilo. Al no tener voz no te encasillas ya que ésta da mucha personalidad, para lo bueno y para lo malo. Es más, hemos estado en programas de radio tan dispares como Disco Grande o El Vuelo del Fénix. También hemos estado en Bandera Negra. Pop, heavy, hardcore…la falta de voz no te define ni te clasifica y te abre más puertas. Incluso en algún momento hemos tocado en acústico como en el Noise Off o en Cuervo Store en el Record Store Day. Casos eventuales.
Y ya para terminar, ¿a quién os gustaría que entrevistásemos?
A Felipe VI (risas).
¡Entonces después del jueves no puede ser!
Precisamente este sábado tocamos con Sonnöv. Son colegas, instrumentales, acaban de publicar disco y suenan muy bien. No se les conoce mucho pero hacen un trabajo de muy buena calidad.